La Quínoa es uno de los mejores granos enteros que existen. Crece en las montañas de los Andes, y se ha utilizado durante siglos en muchos platos sudamericanos. Originalmente considerada por los Incas como “el grano madre“, los conquistadores españoles después de su llegada al nuevo mundo trataron de suprimir esta semilla deliciosa de la dieta local. Afortunadamente fracasaron, y en tiempos más recientes, este grano ha sido testigo de un enorme aumento de popularidad en todo el mundo. La quínoa es una buena opción para las personas con diabetes debido a su bajo índice glucémico y rico contenido nutricional. Este grano también es fácil de preparar, accesible, libre de gluten, delicioso y fácil de incorporar en una variedad de platos frios y calientes.
La quínoa es extremadamente rica en su contenido de proteínas. Posee altas cantidades de dos importantes minerales: hierro y magnesio, los cuales son esenciales para mantener nuestro cuerpo sano. Esta nutritiva semilla contiene además cantidades significativas de vitamina B2, útil para la actividad muscular y la función de las células cerebrales. Su contenido de fibra es dos veces más que otros granos enteros, por lo que es muy eficaz en el control de los niveles de colesterol, control de la presión arterial, prevención de la diabetes tipo 2 y de problemas intestinales. En comparación con el arroz y el trigo, se ha descubierto que la quínoa es más eficaz en reducir el apetito, dejando una sensación de plenitud más completa después de consumirla. ademas de todo lo anterior, es libre de gluten, por lo que puede ser consumida por personas con enfermedad celíaca o intolerancia al gluten.
Como hemos mencionado anteriormente, este grano es muy fácil de preparar. Al igual que el arroz, se hierve en agua durante 15 a 20 minutos y luego se sirve generalmente al lado de carne, pescado o aves de corral. Esta semilla es altamente versátil y puede ser mezclada en una ensalada, o formar parte de los ingredientes en cualquier tipo de sopa. Una taza de este grano contiene 229 calorías, 4 g de fibra y 8 g de proteína. Considere reemplazar el arroz blanco, puré de patatas, o cualquier otro acompañamiento por la quínoa, que sirve como una alternativa mucho más sana.
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